lunes, 7 de marzo de 2016

CINE: Deadpool (Tim Miller)

¿Cómo se hace una crítica de una película que hace autocrítica? Estamos ante la que podría ser (que para mí lo es) la mejor película adaptada de Marvel. El señor Pool, ese mercenario bocazas que consigue (mayoritariamente), hacerte reír con los chistes más simples y absurdos del mundo.
He disfrutado de esta película de amor (que como muchos sabéis, no me gustan ese tipo de películas), porque ha sabido colocar los elementos que más me gustan en el cine: la acción bien hecha, el humor por parte de un protagonista que resulta ser un verdadero genio y una historia triste que te toca muy al fondo (Wilson ya estaría haciendo un chiste con el doble sentido de esta frase).
Deadpool es la historia de un joven llamado Wade Wilson que se dedica a hacer trabajitos pegando a todo aquel que le pidan. Un día por casualidad conoce a Vanessa, empiezan a vivir juntos, se enamoran poco a poco...y como ocurre en toda historia de amor, la vida no es todo un lecho de rosas y a Wade le diagnostican un cáncer, y otro, y otro...y el destino le lleva a acabar en las manos equivocadas que le transforman en un mutante feo que no se atreve a volver a junto de Vanesa hasta recuperar su vieja cara.
Deadpool es una película de humor sin gracia que en manos de Wade consigue que te rías hasta con lo más absurdo, efectos geniales, una acción perfecta (la escena inicial es una maravilla), una película cargada de referencias a los cómics, a otras películas de Marvel y lo más impresionante (y algo que deberían hacer en algunas películas de Marvel desde hace mucho tiempo), la rotura de la cuarta pared (¿o debería decir 16?), haciéndote sentir todavía más dentro de la película, familiarizándote todavía más con el personaje. Es esto lo que consigue que incluso los no comiqueros se sientan a gusto con el personaje.
No prometo que vaya a gustar a todo el mundo, la forma de ser de Wade no agrada a todo el mundo y el hecho de ser más comiquera y diferente al resto puede llegar a resultaros extraña. Pero lo que sí es que merece la pena, porque incluso detrás de esta película con su peculiar humor y referencias que sólo los fans entenderán se esconde una bonita película con un mensaje final que quiere eliminar esa idea de "el físico es lo importante". Estamos ante algo más que una simple película de un mercenario, estamos ante algo más que una película en la que el "supuesto" villano ha salido del armario de la limpieza. Y digo supuesto porque para mí el único villano que existe es el propio miedo de Wade. Os animo a que le deis una oportunidad (aunque los fans seguro que ya lo habéis hecho), porque yo he repetido y me sigue pareciendo una joya.
Le dejo un 8/10 y os dejo que me voy a tomar unas chimichangas.

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